Mintz, Frank

Orígenes del anarquismo en Barcelona de Casimiro MARTÍ

Barcelona, EspañaMINTZ, Frank (1941-....) ; pseud. Martin ZEMLIAK, Israël RENOV

Barcelona, Teide, 1959, 146 pp.
Este libro, con prefacio del gran historiador Vicens Vives, con el visto bueno de Roma y del episcopado de Barcelona, es un testimonio más de la evolución de la España franquista.
Dicho libro escrito por un jesuita, no sólo es objetivo sino que es fundamental para comprender la historia del anarquismo en España. Es objetivo porque dedica dos capítulos de cinco a la filosofía y la teoría de la revolución de Bakunin; y porque el autor consultó los archivos de Amsterdam y Milán, teniendo en cuenta libros pasados o recientes, como de Nettlau o Lamberet.
La cuestión principal está en comprender cómo las ideas anarquistas, que brotan en 1868 en España, sólo se plasman aparentemente en 1910 con la formación de la CNT : ¿ qué pasó mientras tanto?
Martí estudia los orígenes del anarquismo en Barcelona de 1864 a 1870. El movimiento obrero, muy débil en toda España, estaba principalmente concentrado en Cataluña y Euzcadi. Hacia 1862 se formaron los primeros sindicatos Barcelona, y en 1864 tuvo lugar el primer congreso sindical en Barcelona. En 1868, unos generales más tolerantes tomaron el poder, de ahí que los liberales y los republicanos estuvieron menos vigilados.
El movimiento obrero español de aquel entonces no tenía ideología alguna, tendía hacia un reformismo a base de asociaciones, de cooperativas, de unión del Capital y del Trabajo. Los conceptos socialistas estaban casi desconocidos. El movimiento obrero solía defender las ideas republicanas en política, y pretendía arreglar los problemas laborales por las cooperativas (en asociación con los patronos).
Bakunin, miembro de la Internacional, intuyó que la situación estaba madura en España y mandó a un amigo suyo, Fanelli, parlamentario italiano que tenía el derecho a la gratuidad del desplazamiento en ferrocarriles -la falta de medios económicos ya existía-, con el encargo de propagar las ideas bakuninistas (principalmente la revolución mediante una sociedad secreta la Alianza). Fanelli sólo explicó a los españoles una mezcla de dos conceptos : el de la Alianza y el de la Internacional. De ahí que los núcleos de Madrid y Barcelona siguieron la acción anterior, que consistía sobre todo en preocuparse de política, de la lucha entre monárquicos y partidarios de la república.
En septiembre de 1869, Santiñón y Farga Pellicer de Barcelona fueron al congreso de Basilea donde encontraron a Bakunin y entendieron en aquel entonces las ideas suyas. En cuanto regresaron, las propagaron : el cooperativismo no puede resolverlo todo; el cooperativismo es bueno en tanto que permite la solidaridad, malo porque obliga a aliarse a la burguesía. Hace falta enfocar el problema de otro modo : no hay mejoras sociales fundamentales posibles, se tiene que construir el régimen social del porvenir mediante el colectivismo revolucionario.
Los miembros de la Alianza española militaban ardientemente en Barcelona, luego en Reus y Tarragona. Se preparó un congreso obrero que tuvo lugar en Barcelona en 1870. Los aliancistas presentaron su programa : organización de los sindicatos según el esquema de secciones de oficio, federación de oficio, unión de federaciones de oficios en la Federación Regional Española,y al final unión internacional. También se preveían cajas de resistencia, organización de cooperativas en un sentido revolucionario. En política se predicaba la abstención.
Ratificó el congreso la entrada del movimiento obrero español en la Internacional. Pero el nivel de comprensión de los delegados era muy débil a causa de la falta de explicaciones. La abstención política fue adoptada por los organismos sindicales, quedando libres los militantes de votar o no. Los sindicatos abarcaban escasamente un 10% de los obreros barceloneses. Una epidemia de fiebre amarilla redujo la afiliación a la Internacional de 10.000 en julio de 1870 a 2.000 en septiembre.
Los eventos de la Comuna de París asustaron al Gobierno español, se iniciaron represiones contra la Internacional. En el movimiento obrero toda la acción y los esloganes estaban en manos de los aliancistas, que habían sido elegidos en el Consejo federal del sindicato. En 1871, en el congreso de Valencia, fueron nombrados nuevos miembros, que los aliancistas integraron en la Alianza sin precisarles nada de las diferencias entre la Internacional y la Alianza.
No podía seguir así la situación, y con la llegada fortuita del yerno de Carlos Marx, Paul Lafargue, hispanohablante, exiliado de la Comuna, explotó el polvorín. En julio de 1872, se publicó un manifiesto contra la Alianza, que la denunciaba como sociedad secreta, asicomo sus miembros.
Se escindía en dos ramas el movimiento obrero : la que se convertiría en socialista, con Pablo Iglesias, y la que iba a ser anarquista con Anselmo Lorenzo. Fracasó la Alianza porque era un producto importado afirma Martí (p.114), porque se imponía articialmente desde arriba, por que los aliancistas no supieron refrenar su participación en las luchas inmediatas de la clase obrera en detrimento del ideal revolucionario, y sobre todo porque no hubo
"una obra de educación cumplida para lograr acuerdos y soluciones con la suma de las voluntades conscientes"
(Anselmo Lorenzo).
(Noir & Rouge N°27, 1964)
Frank MINTZ