Mintz, Frank

El Laberinto español de Gerald BRENAN

Guerra de España (1936-1939)MINTZ, Frank (1941-....) ; pseud. Martin ZEMLIAK, Israël RENOV

París, Ruedo Ibérico, 1962, 301 pp.
Al leer este libro, no se debe olvidar nunca que se publicó en 1943. Pero al mismo tiempo sabemos que Brenan editó The face of Spain en 1949 y que, por tanto, si hubiera querido tener en cuenta parte de los numerosos libros que se publicaron desde aquel entonces, lo podia hacer fácilmente. La no rectificación equivale aquí, sobre todo, en lo que respecta al anarquismo español a no querer discutir enfoques ajenos e informaciones nuevas.
Al reseñar este 1ibro en 1944, Marie Louise Berneri escribía :
"Ha tratado la cuestión no sólo como un estudioso sino también como un artista y un sicólogo."
Y aunque ella apreciaba la obra, no dejó de destacar tres fallos de Brenan sobre su juicio de 1os anarquista. El primero que el autor seguía en sus trece, pese a visiones distintas y hechos contradictorios. El otro aspecto que M.L. Berneri subrayaba muy justamente :
"Brenan insistió demasiado en el aspecto agrario del anarquismo. Se debió ciertamente al hecho de que vivió en Andalucía, una región completamente agrícola."
Finalmente, ella destaca la ausencia casi total del sentido de la autogestión, elemento que impresionó incluso a muchos testigos ingleses de la época.
Digamos para este último punto que francamente Brenan reduce tozudamente la autogestión al tradicionalismo español, cuando no alude a comunidades agrícolas medievales citando a ... San Agustín (en latín) para concluir (¡!) que el origen de todas las cosas de España está en la misma España. Si así fuera, los fascistas españoles -defensores de las tradiciones de los Reyes Católicos de la España una e indivisible- deberían ser los más ardientes defensores de ... la autogestión.
A propósito de la falange, Brenan no vacila en afirmar que los pistoleros falangistas eran a veces cenetistas lo que era normal porque tenían los mismos enemigos y la misma fe en la violencia (p.234 cap. Frente Popular ). Como se constata, a veces Brenan navega entre las interpretaciohes ingenuas religiosas o seudo democráticas o leninistas de la violencia; tres ideologías que nunca vacilaron y vacilan para fomentar atentados.
Sin embargo, prescindiendo de las alusiones medievalo-literarios (algo como salpicar una historia social de Gran Bretaña con tópicos sobre el plum-puding, Sherlock Holmes, el te ...) la obra de Brenan queda importante para conocer los preliminarios de la guerra civil. El punto más fuerte del libro es el estudio paralelo de la geografía con la implantación social del socialismo y del anarquismo, que no es totalmente exacto, pero válido como corriente general.
En el fondo, Brenan maneja casi únicamente grandes interpretaciones a base de un conocimiento personal fundado a su estancia de unos quince años en Andalucía, antes de la guerra, y nunca a base de un enfoque matizado. Así silencia los acontecimientos históricos que contradicen sus hipótesis: la autogestión durante la guerra que desbarata el medievalismo anarquista. El misno esquema reductor hacia el pasado y falsificatorio está en la Gran Enciclopedla Soviética -edición rusa-en 1926 sobre Kropotkin :
"las pequeñas comunas son imposibles en la industria pesada que utiliza millares de personas. Y sin las máquinas de la industria pesada, la humanidad retornaria a una situación semi bárbara. "
Tampoco es exacto que la religión tuviera un papel popular antes de la guerra civil. Para este punto, se pueden ver las citas que doy en mi libro del sociólogo católico Aznar sobre la desbandada de los seminaristas entre 1930 y 1936.
Pese a sus numerosos fallos, el libro es interesante y documentado.
(Cienfuegos Press, N°2, 1977)
Frank MINTZ